La práctica de Ashtanga comienza siempre con Saludos al Sol (Surya Namaskara en sánscrito). Muchas tradiciones yóguicas creen que el Sol no sólo se encuentra en el Espacio, sino también en el corazón de cada uno de nosotros.
Los Saludos al Sol establecen la base de la práctica, calientan el cuerpo, relajan la musculatura, abren las articulaciones y estimulan el sistema nervioso. Durante su realización, el practicante comienza a ser consciente de la importancia de sincronizar la respiración, el cuerpo, la mente y el espíritu.
En Ashtanga se practican dos tipos de Saludos al Sol: Saludo al Sol A (Surya Namaskara A) y Saludo al Sol B (Surya Namaskara B). Ambos se realizan 5 veces, y ambos empiezan y terminan con Samasthitih, postura inicial de la que parten todas las posturas.
Su nombre en sánscrito es Surya Namaskara A. Consta de 9 movimientos o vinyasas: Urdhva Hastasana (ekam, uno), Uttanasana (dve, dos), Ardha Uttanasana (trini, tres), Chaturanga Dandasana (catvari, cuatro), Urdhva Mukha Svanasana (panca, cinco), Adho Mukha Svanasana (sat, seis), Ardha Uttanasana (sapta, siete), Uttanasana (asta, ocho), Urdhva Hastasana (nava, nueve). Cada uno de estos movimientos corresponde a una inhalación o exhalación, salvo Adho Mukha Svanasana (sat, seis), que se mantiene 5 respiraciones completas.
juliet